viernes, 15 de septiembre de 2017

Los caminos segovianos del agua

Me los he transitado casi todos
a pie enjuto y a nado y a automóvil
con el único afán y único móvil
de placerme en sus aguas y recodos.

Día a día por montes y por valles
los he visto pasar y detenerse,
templarse, desviarse, enfurecerse,
dar de beber, cantar y regar calles.

Riaza, Duratón, Eresma y Cega
son los brazos más largos que he seguido
jugando como a la gallina ciega.

Pero toqué su fondo, letraherido,
y en tan plácida y cándida refriega
quedó mi corazón, ¡ay!, retenido.

91 8470225

No hay comentarios:

Publicar un comentario